La forma en la que una compañía está organizada influye de manera decisiva en el éxito o fracaso de cualquier estrategia empresarial. Una estructura deficiente no solo perjudica su capacidad para maximizar las oportunidades, sino que también puede crear problemas con graves consecuencias financieras.
Empleados que no tienen claras sus prioridades o decisiones estratégicas que no se ponen en marcha son el resultado de una mala organización. La falta de planificación y una deficiente gestión humana están entre las causas de fracaso más importantes dentro de las compañías.
Para minimizar riesgos, las empresas adoptan diferentes estructuras y crean organigramas visuales para representar y trasladar a los trabajadores de una manera más simple e inteligible el funcionamiento de la organización.
En compañías cada vez más complejas donde la tendencia es concentrar la producción “en casa” y ofrecer más servicios sin abusar de la externalización, los diferentes departamentos están obligados a colaborar y a entenderse, ¿qué organigrama puede funcionar mejor para alcanzar las metas propuestas?
Tabla de contenidos
Qué es el organigrama matricial
El organigrama matricial es un modelo que combina en una misma estructura dos formas de separación por departamentos (funcional y por productos/proyectos) y es utilizado mayoritariamente en empresas complejas. ¿Quieres saber por qué trabajar con esta estructura de matriz y cuándo es conveniente utilizarla? Te lo contamos a continuación.
Características del organigrama de matriz:
- Estructura dual: Combina una estructura funcional con una estructura basada en proyectos.
- Doble reporte: Los empleados tienen dos líneas de autoridad (jefes) a quienes deben informar.
- Equipos multidisciplinarios: Los equipos están formados por miembros de diferentes áreas funcionales que trabajan juntos en proyectos específicos.
- Comunicación horizontal: Se fomenta la comunicación y colaboración directa entre los miembros del equipo.
- Coordinación compleja: Requiere de una gestión cuidadosa para coordinar las responsabilidades y prioridades
- Mayor flexibilidad y agilidad: Permite adaptarse rápidamente a los cambios y desafíos del entorno empresarial.
Funcionamiento de la estructura de matriz: ventajas y desventajas
La estructura matricial, también llamada de matriz o rejilla administrativa, es un sistema de mandos múltiples en el que la estructura organizacional tiene dos formas de separación simultáneas: una funcional y otra por productos o proyectos. Es propia, por tanto, de empresas donde hay más de un director o más de un responsable por departamento o trabajador.
Por ello, cada persona está sujeta tanto a las instrucciones de los responsables funcionales como a las de los de producto.
Según explica Idalberto Chiavenato en su libro «Comportamiento organizacional», este tipo de estructura es propio de organizaciones complejas, como laboratorios de investigación y desarrollo, empresas aeroespaciales, agencias de publicidad, despachos de consultoría, universidades, hospitales o compañías de tecnología avanzada, donde las funciones deben estar sincronizadas con los productos o servicios que ofrece la organización.
Y es que cuando una empresa se enfrenta a proyectos que requieren de la colaboración de diferentes equipos y áreas funcionales, la estructura de matriz puede facilitar la coordinación y la comunicación efectiva entre ellos, aportando al mismo tiempo flexibilidad, agilidad y adaptabilidad.
La importancia de la coordinación en el organigrama matricial
La coordinación y la multidisciplinariedad desempeñan un papel vital a la hora de decidirse por la implantación de una estructura matricial. Debido a que la consecución del éxito depende de la colaboración de diferentes equipos y áreas funcionales, con personas con diferentes habilidades y competencias, la coordinación efectiva garantiza el trabajo en equipo, evitando conflictos, redundancias o malentendidos.
Esta práctica genera una mayor eficiencia y calidad en la ejecución de proyectos, ya que se aprovecha de la experiencia y el conocimiento de diversos especialistas, facilitando que todos los miembros tengan acceso a la visión integral de los proyectos y puedan abordar desafíos desde diferentes ángulos.
En definitiva, la estructura matricial es un medio idóneo para reunir las diversas habilidades especializadas que se requieren para resolver un problema complejo.
Ventajas de un organigrama matricial
- Combina las ventajas de la organización funcional, que se concentra en funciones especializadas y agrupa a los especialistas, y aquellas de la organización por producto, la cual facilita la coordinación de los especialistas.
- La estructura funcional hace hincapié en la especialización, pero no en el negocio, mientras que la estructura de productos se concentra en el negocio, pero no en la especialización en las funciones.
- Facilita la coordinación de varias tareas complejas e interdependientes, permitiendo al mismo tiempo la especialización.
- Integra a diferentes especialistas, mejora la comunicación y aumenta la flexibilidad de la organización para el cambio.
- Permite asignar especialistas a diferentes productos o servicios, en lugar de mantenerlos restringidos a un solo departamento funcional o de producto. Los talentos son utilizados en varios productos o servicios y no los monopoliza un departamento.
- El organigrama matricial ofrece economías de escala al permitir una utilización más eficiente de los recursos de la organización.
Desventajas de un organigrama de matriz
- Rompe con el concepto de unidad de mando. Los trabajadores tienen dos jefes, el gerente del departamento funcional y el del departamento de producto, lo cual implica una doble cadena de mando.
- Puede provocar confusión respecto a la autoridad y puede crear conflictos de poder y tensión entre las personas.
- Cuando se relaja la unidad de mando aumentan la ambigüedad y la posibilidad de conflicto. No queda claro quién depende de quién.
¿Qué perfil de empresas lo utilizan? El ejemplo de organigrama de matriz de Apple
Al contrario de lo que sucedía hace más de una década cuando las empresas decidieron externalizar productos y servicios, la tendencia actual es la “reindustrialización” y la aglutinación de una mayor oferta de productos y soluciones que, a su vez, son cada vez más complejas.
Esto les obliga a transformar la organización de las plantillas al ser necesaria la participación y colaboración entre diferentes departamentos. Esta mayor complejidad es la que está favoreciendo que las empresas asuman con mayor entusiasmo el organigrama de matriz, buscando una mayor agilidad y adaptabilidad.
Entre las empresas más innovadoras del mundo que trabajan con un organigrama de matriz está Apple, donde la compañía combina los modelos funcional y divisional. La empresa de la manzana cuenta con una división basada en departamentos de marketing, finanzas, ventas, atención al cliente, etc. y al mismo tiempo con una división basada en líneas de negocio como App Store, Safari, iPhone, iPad, iTunes, Apple Watch, Apple Play, Apple TV, etc.
La estructura matricial con la que trabajan en Apple permite una mayor coordinación y colaboración entre estos equipos y departamentos, aprovechando las sinergias y consiguiendo una alineación conjunta hacia un mismo objetivo, impulsando al mismo tiempo la autonomía de los empleados.
Una estructura de matriz para optimizar recursos
La asignación de roles, funciones y autoridad visualizada en el organigrama matricial tiene el objetivo de optimizar los recursos de la empresa a la hora de llevar a cabo un proyecto o desarrollar un producto o servicio.
Por medio de esta estructura en la que los equipos dependen de dos mandos y visiones diferentes, pero complementarias (funcional y producto), se puede mejorar tareas como la supervisión, la monitorización y el control del trabajo realizado.
Además, esta combinación de conocimientos y habilidades de diferentes áreas y trabajadores promueve la creatividad y la búsqueda de soluciones innovadoras, lo que convierte al organigrama de matriz en una herramienta idónea para las empresas que buscan optimizar su rendimiento y destacar en un entorno empresarial competitivo y en constante cambio.
