Cada vez somos más conscientes de la importancia del bienestar laboral pero no basta con eso. Según el último informe de Grupo Adecco, más del 40% de los españoles cree que su compañía no se preocupa por el bienestar como ellos quisieran.
También la Guía del Mercado Laboral 2022 arroja un dato sorprendente: un 43% de las organizaciones afirman que sus equipos sufren burnout o desgaste laboral, que se manifiesta con agotamiento físico y/o mental.
¿Sabes si tus trabajadores están a gusto y satisfechos? ¿Tienes un plan de bienestar laboral en tu empresa? ¿Te planteas añadir nuevas estrategias de mejora?
A veces escuchamos que el bienestar laboral es un tema complejo porque no hay una medida única para valorarlo o porque es algo muy subjetivo pero la realidad es que lo único que tienes que hacer es estar dispuesto a poner en en el centro de todo a las personas.
Tabla de contenidos
¿Qué es el bienestar laboral?
Una empresa debe comprometerse a proveer un estado general de satisfacción y realización a sus empleados, para que se sientan a gusto y no deseen abandonar su puesto de trabajo. Eso es el bienestar laboral.
La clave es que no solo nos referimos a estar sanos de salud y no tener enfermedades sino también al bienestar emocional. Teniendo en cuenta que dedicamos un tercio de nuestra vida al trabajo, es lógico que los equipos de recursos humanos quieran satisfacer a las personas con medidas que les hagan sentir bien en su horario laboral.
Un buen ambiente en la oficina, promover las conexiones sociales cuando se trabaja en remoto o las oportunidades de conciliación de la vida familiar y laboral son algunas de las pruebas que reflejan si el bienestar laboral existe en una empresa.
El employer branding, la imagen que tienen de ti tus empleados, depende directamente del bienestar laboral que, además, cuenta con otros beneficios como aumentar la productividad, disminuir la tasa de rotación, dar seguridad y estabilidad a las personas, reducir los niveles de estrés o mejorar el clima laboral.
6 pasos para crear un plan de bienestar laboral
Una de las responsabilidades del departamento de recursos humanos es diseñar un programa de bienestar laboral. Se trata de un conjunto de estrategias para identificar, evaluar y prevenir los riesgos psicosociales que pueden estar viviendo sus trabajadores desde su puesto de trabajo.
En el fondo, se trata de conseguir que la productividad siga creciendo pero sin renunciar al bienestar físico y psicológico de las personas. Es decir, no se puede entender el progreso de una empresa sin el bienestar de las personas.
Estos programas son diferentes en cada compañía pero hemos identificado 6 pasos comunes que no deberías saltarte.
Evaluar qué se quiere lograr con este plan
Es decir, partir de las necesidades reales que tienen los trabajadores. Antes de implementar cualquier tipo de medida, necesitas hacer un trabajo de prospección que te permita detectar los problemas más visibles y los que no lo son tanto pero que igualmente, influyen en el día a día.
Herramientas: los cuestionarios, entrevistas o talleres grupales te darán información cualitativa pero también puedes consultar datos como la tasa de rotación, las bajas voluntarias que ha habido en el último año, etc.
Extra bonus: protege la confidencialidad de las respuestas para que se sientan cómodos y quieran participar compartiendo sus opiniones.
Definir objetivos
Para medir los resultados de tu programa de bienestar, deberás fijar las metas principales que te propones, como por ejemplo:
- Conseguir que al menos el 80% de la plantilla puntúe con 8 o más su bienestar laboral en los últimos 6 meses.
- Mantener el índice de rotación de personal dentro de X valores en el próximo año.
- Reducir los conflictos laborales por mala comunicación.
Extra bonus: recuerda que estas metas deben ser realistas y estar enfocadas todos los departamentos y profesionales de la empresa.
Diseñar soluciones
Piensa en acciones realistas, que se puedan llevar a cabo de forma inmediata y que estén enfocadas en tres líneas: hábitos saludables, bienestar social y bienestar mental. Aquí te damos algunos casos concretos:
| Hábitos saludables |
| Taller de higiene postural para el trabajo |
| Iniciativas de nutrición saludables para el comedor de la oficina |
| Espacios de descanso y relajación |
| Espacios de fitness |
| Programas de pausas activas |
| Bienestar social y/o personal |
| Políticas de flexibilidad laboral |
| Planes de desarrollo profesional |
| Programa de reconocimiento laboral |
| Salario emocional y retribución flexible |
| Servicios de cuidado infantil y guardería |
| Bienestar mental |
| Incorporar la figura del psicólogo en la empresa |
| Programas de apoyo emocional |
| Programas de mindfulness y meditación |
| Salario emocional y retribución flexible |
| Coaching individual o grupal |
Extra bonus: Cuanto mejor conozcas las necesidades de tu plantilla, más fácil será para ti definir las medidas. Dedica tiempo a hablar con ellos y ajusta al máximo estas iniciativas para sacar el máximo partido.
Obtener los costes relacionados con el plan de bienestar laboral
Implantar las soluciones conlleva un coste, tanto económico, de medios y humanos que se debe tener presente. Si no es posible hacer frente a la inversión, en lugar de dar por perdido el programa, haz una escala para ordenar prioridades e ir incluyendo progresivamente cada medida. Poco a poco, se notará la diferencia.
Extra bonus: evalúa si es necesario contratar a un especialista en bienestar o formar un equipo interno para coordinar las medidas del programa.
Informar a todos sobre el plan
Primero, debes conseguir la aprobación de la dirección ya que contar con su apoyo facilitará mucho más la implementación. Por eso es importante alinear los objetivos del plan con los que tiene la empresa.
El siguiente paso es comunicar el programa al resto de la compañía, detallando la forma en que se va a llevar a cabo su implantación o cómo pueden participar de él si lo desean.
Extra bonus: Utiliza diversos canales para que el mensaje llegue a todo el mundo; desde mensajería instantánea o enviar un email adjuntando una guía, por ejemplo. Aunque, sin lugar a dudas, lo más recomendable es reunir a todo el equipo para esta ocasión.
Seguimiento de los resultados
Analizar los resultados es fundamental para hacer las modificaciones oportunas en caso de no conseguir los objetivos marcados. Un plan de bienestar nunca se da por terminado ya que es un proceso continuo y dinámico que puede cambiar en cualquier momento para adaptarse a nuevas situaciones y nuevas demandas de los equipos.
Extra bonus: el feedback de los empleados es clave para saber si el programa está siendo un éxito o no. Combina entrevistas, encuestas o incluso workshops grupales para que puedan aportar más de su parte.
Estrategias para mejorar el bienestar laboral
Ya sea por cambios en la compañía, por haber detectado nuevas necesidades…Si quieres llevar tu plan de bienestar un paso más adelante para conseguir una implementación exitosa, estas son algunas recomendaciones que puedes seguir:
Dar más autonomía a las personas
Hay estudios que relacionan las altas exigencias laborales y el control laboral excesivo con enfermedades cardíacas, además de con una peor salud mental para el trabajador. Sin llegar a estos extremos, dar a tus equipos más autonomía y libertad para asumir nuevas tareas y resolver desafíos hace que se sientan más valorados e importantes en su desempeño. Esto puede mejorar la productividad, el rendimiento e incluso el trabajo en equipo porque las personas tienden a unirse para superar los obstáculos.
Flexibilidad en el día a día
Dar más opciones sobre los horarios de entrada y salida también influye en el bienestar laboral de forma positiva, así como poder escoger el modelo de trabajo (presencial, en remoto o híbrido). Con la flexibilidad también podemos conseguir disminuir la tasa de rotación ya que si las personas están satisfechas en este ámbito, podrán conciliar mucho mejor su vida laboral y personal.
Favorece la cultura de equipo
Crear una cultura laboral donde los empleados puedan desarrollar relaciones de apoyo con sus compañeros es una estrategia importante para aumentar el bienestar. Además, también se asocia a un mejor estado de salud mental. Por ejemplo, puedes organizar actividades periódicas para que diferentes equipos, que no suelen trabajar juntos, se conozcan entre sí y sepan un poco más acerca de sus proyectos.
Reconoce sus logros
Una cosa es la satisfacción de los clientes y otra, la de tus equipos, que no debe quedarse en el olvido. Es importante terminar un proyecto y hacer una valoración del papel de cada persona, algo que impactará positivamente en su estado de ánimo y aumentará su compromiso para futuros proyectos.
Involucra más a las personas
La retroalimentación es clave para una compañía. Apóyate en los one-to-one (reuniones individuales entre el trabajador y su superior directo) para dar feedback.
Los empleados quieren ser escuchados y si no sabes cómo involucrarlos más en el día a día, solo necesitas reunirte con ellos más a menudo para que ellos mismos te demuestren todo lo que están dispuestos a hacer por su compañía, siempre que estén felices.
