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Qué es y cómo redactar una carta de despido [+ Modelos]

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6 minutos de lectura
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El despido es la sanción más grave que prevé la legislación laboral a un trabajador y por lo tanto es necesario hacerlo correctamente y de manera formal a través de una carta de despido debidamente cumplimentada.

Seguro podrás coincidir con nosotros en que una de las funciones menos agradables es la de despedir a un empleado. Es por ello que hemos redactado este artículo, para facilitar la tarea de desvinculación a la vez que velas por la correcta redacción de la carta. Así te aseguras de evitar problemas legales y posteriores conflictos.

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Para que puedas ingresar los datos de tu empresa y exponer de manera simple los motivos por los cuales se está tomando esta decisión. Recordemos que es un momento de gran sensibilidad, tensión y emocionalidad, por lo que será importante conocer todos los pasos a fin de acompañar la transición de la persona de la mejor manera posible.

¿Qué es una carta de despido?

La carta de despido es el documento oficial y la comunicación escrita que recibirá el trabajador cuando lo despidas, en ella aparecerán los motivos por los que se ha decidido extinguir la relación laboral, la fecha efectiva del despido, el finiquito y las cantidades que se le deben.

La carta de despido es un documento difícil de redactar, y no por su contenido en sí, sino por lo que supone rescindir el contrato de un trabajador. Al tratarse de una decisión unilateral de la empresa y conforme lo expresado en el art. 53 del Estatuto de los Trabajadores, es de gran importancia el hacer uso de la carta para formalizar la comunicación al empleado de una manera justa y transparente.

Pero cuidado, que debe redactarse con especial atención a la información que veremos a continuación, ya que por ejemplo, si los motivos no se exponen con claridad, la carta podría convertirse en herramienta probatoria de un despido improcedente.

También puede darse el caso de que la empresa vea afectada su producción y no tenga otra manera de subsistir más que recortando el personal. Incluso aquí se recomienda utilizar la carta para formalizar la situación de despido.

Sea por el motivo que sea, oficializar la desvinculación de un trabajador nos permitirá tener constancia de la comunicación efectuada y un respaldo documental probatorio a efectos de posibles litigios futuros.

Envío, firma y recepción de la carta de despido

En el momento en que comunicamos el despido a un trabajador, la ley nos indica que debemos entregar una carta de despido donde expongamos toda la información necesaria para que sea entendible y así respetar a la persona afectada.

Lo ideal es que dicha carta quede firmada por la persona que estamos desvinculando aunque puede suceder que nos encontremos ante su negativa. En ese caso es recomendable comunicar que para que se pueda quedar una copia de la misma y se la pueda llevar a sus asesor, debe firmarla aunque sea escribiendo “firmada a efectos de recepción, no conforme con el contenido”. De esta forma el trabajador se sentirá más tranquilo y tendrá el mismo efecto que una firma.

Tal como comentábamos en otros blogs sobre despidos e indemnizaciones, si en los despidos algún trabajador se niega a firmar existen dos opciones:

  • 1ª opción: Realizar una diligencia testifical, es decir, que firmen dos personas testigos de la entrega de la carta y negación a firma del empleado. Esta opción es la más agresiva de las dos.
  • 2ª opción: Enviar automáticamente un burofax a la última dirección del trabajador para que el despido quede comunicado de manera formal.

Si bien a efectos de notificación existen varias formas de llevarlo a cabo, concluimos que es conveniente que el trabajador firme la carta de despido y se quede con una copia de la misma ya que esto no significa su conformidad sino la correcta recepción del comunicado.

Partes de la carta de despido

Partiendo de la base que una carta de despido sirve para comunicar la extinción de una relación laboral, debemos tener en cuenta no olvidar la siguiente información:

La decisión de despido

Expresada de forma clara y al comienzo de la carta. Tiene que quedar en claro el objetivo del escrito para evitar toda ambigüedad.

Causas y motivos del despido

Escribiremos aquí el tipo de despido que corresponda, explicitando las causas que han llevado a la toma de decisión. Si bien no es necesario que acreditemos las pruebas en la carta, deberemos dejar correctamente asentado el motivo que genera la desvinculación.

Existen causas objetivas (que no dependen del trabajador) o del tipo disciplinario, por ejemplo en caso de comportamiento indebido, exceso de inasistencias injustificadas, etc.

Fecha en la que el despido tendrá efecto

Especialmente importante para que el trabajador comprenda cuándo será su último día. Aquí explicaremos si se está dando el preaviso legal o si se hará efectivo el mismo día, debiéndose abonar esos días en dinero.

Datos de la empresa e información del trabajador

Debemos indicar los datos completos de la empresa y del trabajador generalmente al principio de la carta. En algunos casos haremos mención al tipo de contrato, puesto o antigüedad, sobre todo si debemos justificar los costes que supone para la empresa en caso de no poder asumirlos.

Indemnización correspondiente

En el caso de despidos por causas objetivas, tendremos que indicar el monto de la indemnización y ponerla a disposición en el mismo momento que entreguemos la carta. Cuando no se pueda hacer frente a ese pago porque la causa objetiva así lo declara, se deberá dejar también por escrito a fin de abonarlo posteriormente. Si por el contrario, el despido se produce por causas disciplinarias, el trabajador no tendrá derecho a indemnización.

Lugar, fecha, firma y sello de la empresa y del trabajador

Los datos del día y lugar actual en que se entrega el documento. Siguiendo con lo anterior, deberá constar la firma del trabajador. Si se negase a hacerlo, de las dos personas que atestiguan que la carta ha sido entregada en tiempo y forma. Recuerda que como última opción tendríamos el burofax.

Tipos de carta de despido

En España existen únicamente dos tipos de despidos, por lo que solo se puede emitir una carta de despido en el supuesto de: causas objetivas o disciplinarias. A continuación, te detallamos más sobre cada uno de ellos:

Carta de despido por causas objetivas

Al momento de gestionar un despido por causas objetivas debemos tener en claro el motivo que genera la extinción. Entre estas causas por parte de la empresa, podemos identificar las económicas, técnicas, organizativas, productivas o de fuerza mayor.

A la hora de notificarlo, debemos acreditar los datos o motivos de forma clara y coherente, sin dejar lugar a dudas que puedan convertir ese despido en improcedente.

Carta de despido disciplinario 

La mayor diferencia será que muchas veces esta decisión vendrá luego de una serie de advertencias o sanciones al empleado. Aquí debemos dejar en claro el motivo y acciones que han llevado al despido.

Por otro lado, el art. 53 del Estatuto de los Trabajadores fija que en función de la causa del despido y de las circunstancias del trabajador, pueden existir las siguientes obligaciones en el momento del despido:

  • Si el trabajador es representante legal de los trabajadores, o delegado sindical, se deberá obligatoriamente antes de entregar la carta de despido abrir un expediente sancionador contradictorio. Esta obligación también será obligatorio si así lo exige el convenio colectivo
  • Si el trabajador estuviera afiliado a un sindicato y fuese conocido este hecho por el empresario deberá dar audiencia previa a los delegados sindicales de la sección sindical correspondiente a dicho sindicato.

Modelos y ejemplos de carta de despido

En Factorial nos preocupamos por tu bienestar laboral, sabemos que el proceso de despedir a alguien no es fácil ya que intervienen diferentes factores que pueden perjudicar la tranquilidad de tu equipo. Por un lado, están las reglas que se deben cumplir al momento de elaborar una carta de despido laboral y por otro el contar con los elementos necesarios para que la carta de despido sea válida legalmente.

Por ello, hemos elaborado un modelo de carta de despido objetivo y otro de despido disciplinario para que los puedas usar como una guía al anunciar la finalización del contrato a un trabajador. Recuerda que estos modelos de carta de despido cuentan con la estructura que hemos mencionado y queda a tu criterio modificar los datos para hacerla lo más personalizada posible.

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Modelo carta de despido objetivo

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Modelo carta de despido disciplinario

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Modelo de carta de despido improcedente

Una carta de despido improcedente es aquella cuando la empresa despide a un trabajador y en la carta se reconoce que es por una causa improcedente. Es decir, los motivos del despido son injustificados y no son válidos legalmente, por ejemplo, un trabajador con bajo rendimiento de ventas o que ha abusado de confianza en el desempeño de su trabajo.

Dentro de un modelo de carta de despido improcedente las empresas están obligadas a otorgar una indemnización de 45 días por año trabajado (períodos antes del 12 de febrero de 2012) y de 33 días por año trabajado (períodos posteriores al 12 de febrero del 2012) con un máximo de 24 mensualidades de salario (720 días de salario).

 

Mas allá del motivo que genera la causa del despido, no hay que dejar de lado el hecho de que estamos tratando con personas y emociones. Debemos tratar de hacerlo lo mejor posible dadas las circunstancias, explicando lo sucedido y ofreciendo toda la ayuda posible a los afectados. Humanidad, empatía y compañerismo son clave para atravesar esta situación tanto dentro como fuera de la empresa.

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