Jose Burgos, CEO y fundador de Fresh People, nos cuenta que su agencia ayuda a las empresas tecnológicas a poner la gestión de las personas en el corazón del negocio.
En este nuevo episodio del podcast de Factorial hablamos con él sobre desarrollo de talento en las organizaciones. ¿Quieres saber cuál es su impacto en cada negocio? Te lo contamos a continuación.
¿Qué es el desarrollo de talento?
Jose nos cuenta que responder esta pregunta no es fácil. Antes, cuando se hablaba de desarrollo de talento, se hacía referencia a cosas muy concretas como la importancia de la formación para obtener determinadas habilidades o para alcanzar cierto nivel de conocimiento.
En la actualidad, el desarrollo del talento está más centrado en la cultura de la organización y el espacio que se les da a las personas dentro de la empresa para que crezcan. En este sentido, el primer paso para los responsables del departamento de RR.HH. sería identificar si la persona se alinea a la cultura de la compañía.
Según Jose, las organizaciones no tienen la responsabilidad de hacer que la gente se desarrolle, pero sí son responsables de crear los espacios adecuados para que puedan hacerlo. Al mismo tiempo, cada persona tiene que encontrar el lugar donde realmente pueda alcanzar este objetivo. Es, en definitiva, una decisión individual de cada trabajador.
Alineado a ello, la tarea de los líderes de cada compañía se torna clave, porque dentro de su rol deben:
- Potenciar a la persona en su carrera profesional.
- Motivar a cada miembro del equipo en cada reto.
- Retener el talento.
Cambio en el modelo del desarrollo de talento
Esta es la compañía de tu vida
Esta es la idea que subyace en el modelo tradicional, es decir, empresas intentando convencer a las personas de que ese es el único lugar para desarrollarse y crecer. Esta concepción resulta muy poco flexible, sobre todo, pensada en el contexto actual, donde el cambio constante es la norma.
Bajo esta idea tradicional, dentro de las organizaciones se evalúan indicadores de desarrollo de talento que muchas veces no permiten entregar un feedback realmente constructivo al equipo de trabajo.
Además, las propuestas de formación y oportunidades para adquirir nuevas habilidades son demasiado rígidas, ya que se establecen en momentos específicos a lo largo del año.
En palabras de Jose, el modelo tradicional es claro, es estandarizado, brinda la seguridad de establecer un principio y un final para los procesos, pero simplemente no funciona.
Esta es tu vida en esta organización
Esta es la idea detrás del modelo actual en desarrollo del talento. Las empresas que suscriben a esta tendencia facilitan espacios para que el equipo disfrute la experiencia de ser parte de la compañía. Esto es, que cada individuo pueda encontrar oportunidades de crecimiento y aprendizaje, pero también que tenga el lugar para aportar su valor.
Lo que se busca es el éxito psicológico de cada persona.
Estas organizaciones entienden que el desarrollo del talento es algo que sucede constantemente y de forma dinámica. Algo que, por supuesto, se relaciona al entorno cambiante y volátil en el que vivimos.
El razonamiento es bastante sencillo, pero decisivo: si el contexto cambia continuamente, el interior de las empresas también debe tener la flexibilidad suficiente para poder hacerlo. Si el corazón de las organizaciones son las personas que las conforman, facilitarles el desarrollo continuo es también una apuesta por adaptar el negocio al entorno actual.
Indudablemente, un negocio que consigue adaptarse de forma dinámica al contexto tiene mayores posibilidades de seguir creciendo.
¿Cómo materializar el desarrollo de talento?
Jose nos cuenta que existen dos factores principales para materializar el desarrollo del talento en las empresas. El primero de ellos es “encontrar de qué hablar con tu equipo de trabajo”.
Se trata de generar conversaciones de calidad, con un lugar y contexto determinado, donde se pueda plantear de manera clara qué es lo que se espera de cada persona dentro de la empresa. Al mismo tiempo, en estas charlas es importante dar lugar a que los trabajadores compartan sus dudas y lo que necesitan para cumplir con sus objetivos.
Para llevar a cabo estas conversaciones hay 3 etapas clave en las que se debe:
- Pactar un idioma en común que sea útil.
- Promocionar ese idioma y los comportamientos vinculados a este.
- Intentar que el propio equipo de trabajo sea el que lidere ese idioma.
Con la conversación se genera una relación de confianza en donde cada empleado puede abrirse a comunicar cuáles son sus dificultades y qué conocimientos o habilidades necesita desarrollar para su actividad.
Por otro lado, estas charlas invitan a la reflexión, para que cada persona asuma un rol activo en la evaluación de su propio desempeño y pueda identificar qué es lo que necesita para asumir cada nuevo reto e impactar de forma positiva en la organización.
De ello se desprende el segundo factor que es el de pactar los compromisos que permitan desarrollar el talento. En otras palabras, cada conversación es, de alguna manera, un compromiso de mejora.
Desarrollar el talento en la empresa paso a paso
Los siguientes son los pasos que las compañías pueden seguir para enfocar sus esfuerzos en desarrollar el talento:
- Tener en claro cuál es la cultura de la empresa.
- Saber cuál es la propuesta de valor de la organización.
- Buscar personas alineadas a esto.
- Conversar con los individuos y escucharlos.
- Comunicar con claridad el impacto que tiene la tarea de cada persona en los resultados del negocio.
Para cerrar el podcast, Jose nos cuenta que, si bien las empresas tienen que ser capaces de generar espacios para que las personas se desarrollen, al final, cada individuo es dueño de su propio desarrollo.
Muchas gracias a Jose Burgos por ser parte del podcast de Factorial. Sin dudas será un gran incentivo para todas aquellas organizaciones que quieran potenciar el desarrollo del talento dentro de sus equipos.
